En esta noticia hablan de una compañía que ha presentado un dispositivo de almacenamiento basado en memoria flash, adosado a una tarjeta PCIE. Comenzarán con 80 GB, y durante el 2008 preveen llegar a los 640 GB y puede que hasta a 1.2 TB. Lo impresionante es el rendimiento: Flynn said the card has 160 parallel pipelines that can read data at 800 megabytes per second and write at 600 MB/sec.
Las compañías que trabajan con discos duros tradicionales han anunciado en pocos meses un par de avances que permitirán elevar la capacidad de almacenamiento, pero por mucho optimismo y avances que le echen se trata tan solo de una ilusión: No pueden competir con la memoria flash. Es de esperar que vuelvan a reusar ideas del pasado, como añadir otro brazo al disco duro para reducir los tiempos de acceso; incluso podrían recurrir a utilizar un laser o cualquier cosa, pero aun así la suerte está echada: la memoria flash prevalecerá. Su único inconveniente es su precio -30$ por GB, para el juguete descrito arriba-, pero el mercado se encarga de ajustar los precios.
29 de septiembre de 2007
La fiebre flash
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