A estas alturas todo el mundo estará enterado del notición bomba de la compra de Motorola Mobility por parte de Google. Como todo el mundo está opinando, yo no voy a ser menos. No me hice un blog para estar callado.
En primer lugar, creo que hay que dejar claro que esta compra es un noticia mala, pésima, para la industria del software. No por si misma, sino por lo que la motiva. Partamos de que, como ha señalado todo el mundo, el objeto de Google es poseer las 17.000 patentes + 7.000 pendientes de Motorola para proteger a Android contra ataques legales (no es sólo que resulte poco creíble que quieran pagar 12.500$ millones para vender hardware, es que lo resaltan ellos en el propio anuncio). Esto significa que Google se ha visto obligada a gastarse 12.500$ millones en actividades absurdas e improductivas como las patentes de software, unos vastísimos recursos monetarios que de otro modo se habrían utilizado en inversión productiva (o en recompensar la innovación con casinos y furcias). El talento de Google y el progreso de la informática hacen posible sobreponerse a estas penalizaciones, pero no es ni mucho menos una situación ideal. Esta industria podría progresar aun más rápido con una regulación adecuada.
Eso si, si aceptamos el juego de las patentes y pasamos por alto lo mucho que apesta, los dos Steve, Jobs y Ballmer, deben estar poco contentos. Ambos tenían montañas de millones con vocación de adquisiciones estratégicas grandiosas como la de Nortel, y ambos han dejado que su principal competidor en teléfonos se compre un magnífico escudo a prueba de patentes.
Pero intentemos ver el lado positivo: A partir de ahora Google fabricará móviles propios, y es muy posible que esto conlleve una mayor apertura en las relaciones entre hardware y software libre. Es cierto que aunque Google tiene una forma muy particular de entender el software libre, y que los fabricantes de teléfonos android tienen a veces sus cosas, las cosas no estan tan mal, pero se puede mejorar. El estado de los drivers libres de hardware Android (por no hablar de su inclusión en Linux) es mejorable, y aquí los futuros teléfonos de Google/Motorola pueden ayudar. Eso facilitaría a otras plataformas libres alternativas no-Android, o a personalizaciones variopintas de Android, producir ROMs con facilidad para estos teléfonos.
Por cierto, que una vez más no entiendo a los mercados. 12.500$ millones es una cifra obscena, dificil de apoquinar hasta para Google, que no van a recuperar a corto plazo y posiblemente ni siquiera a largo, por muchos teléfonos que vendan. Es una compra para beneficiar principalmente a terceros, pero los inversores no parecen estar furiosos, lo cual confirma que la valoración en bolsa de Google es más cuestión de fe que de otra cosa. La verdad, no me extraña que Warren Buffet no quiera invierta ni un dólar en compañías de un sector tan extravagante.
Motorola Mobility valía en bolsa 7.500 millones de dolares, google la ha comprado por 12.500 lo que supone un sobrecoste de 5000 millones de dolares.
ResponderEliminarPero Motorola Mobility tenia 3000 millones en cash, así que no parece una cifra tan obscena teniendo en cuenta todo lo que se llevan.
Otro motivo para tan alto precio, es que al parecer Microsoft estaba también interesado en comprar a Motorola, seguramente Motorola uso ese argumento para inflar un poco el precio.
ResponderEliminarEs innegable que Google ha pagado tan alta cifra por las patentes, pero no me resulta descabellado que quieran recuperar el dinero vendiendo hardware. ¿Por qué no?
ResponderEliminarLo digo porque (que yo sepa) Google apenas saca tajada de Android. En dinero contante y sonante Android no le da ni para pipas a Google. Eso sí, al vender tanto recibe algo que quizá sea más importante: poder sobre el mercado.
A la gente se le está escapando que aparte de vender el teléfono físico Google controlará todo el ecosistema (al estilo Apple). Es decir, que no vendrá una HTC y pondrá su servicio de en la nube con su tienda de música, de aplicaciones, etc.
Yo sí veo posible que Google recupere ese dinero vendiendo el teléfono + el ecosistema. Como ya muchos han observado, Google tendrá que hilar fino para no cabrear mucho sus fabricantes amigos que pasarán a ser competidores, tanto en hardware como en ecosistemas.