Mientras haya dinero...

Hace dos años que Microsoft "convenció" a Nokia para atar su futuro al de Windows Phone. Con el trato, Nokia conseguía una plataforma de software...y unos cuantos millones por el detalle de dar oportunidad a Microsoft de tener algún futuro en la telefonía portátil. Dicho de otro modo, Microsoft compró con dinero la oportunidad que no había sabido aprovechar.

Hoy, Microsoft ha dado un préstamo de 2.000$ millones para que Dell salga de la bolsa y quede en manos de su dueño, sin tener que dar cuenta a los inversores. Si meterse en la fabricación de hardware con el Surface -que no está siendo un éxito de ventas- ya le causó roces con los fabricantes de PCs, no creo que aproximarse amistosamente a Dell vaya a mejorar esas relaciones. Aunque tampoco se sabe muy bien qué pretende Dell. ¿Seguir afianzándose en entornos empresariales, volver a intentar vender pantallas táctiles portátiles? Una de las motivaciones para salir de los mercados es no tener que dar explicaciones públicas a nadie. Por sus productos les conoceremos.

Cabe preguntarse si hay algún paralelismo entre ambos casos, un intento de ganarse el apoyo de empresas a golpe de talón. Se hace difícil pensar que Microsoft haya decidido prestar 2.000$ millones a alguien para que le sea infiel. Los demás fabricantes de PCs, en cambio, tienen bien claro que en su objetivo vital de seguir vendiendo PCs e intentar pillar, si pueden, un trozo de tarta portáctil, no va a haber fidelidad a ningún software.

Y no limitan sus infidelidades a Android. Acer, por ejemplo, ha decidido probar con chromebooks. Y, para sorpresa de todos, incluidos este servidor de ustedes, y los linuxeros que están cansados de los chistes de "the year of the linux desktop", resulta que los chromebooks han copado el 5-10% de sus ventas a EE.UU. Es una miseria, pero sorprendente. HP por su parte acaba de presentar su chromebook, Lenovo lo va a probar orientándolo al mercado gubernamental-escolar, y los que ya lo habían adoptado, como el omnipresente Samsung, se están encontrando en el puesto número 1 de portátiles más vendidos en Amazon, por delante de los Macbook.

Como cuentan en ZDNet, esta fiebre por los chromebooks no es una novedad: no se trata más que la reedición de la fiebre de notebooks baratos con linux de hace algunos años. En aquel entonces, Microsoft actuó con rapidez, reanimando XP como sistema operativo con bajo uso de recursos, con mucho éxito. Ahora tendrá que hacer una jugada parecida. Windows 8 no es la catástrofe técnica que fue Vista, pero su polémica interfaz (o el precio de las licencias) están siendo un obstáculo. Pero algo tendrán que hacer: que Microsoft no tenga éxito con los portáctiles y que Windows 8 esté teniendo peor acogida que Vista es un problema, pero que Linux tenga el atrevimiento de empezar quitar cuota de mercado a Windows en su feudo sería como para hacer saltar todas las alarmas.